PRESIDENTE ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR: Amigas, amigos de Salina Cruz, de comunidades, pueblos, de municipios de esta importante región del Istmo de Tehuantepec:
Me da mucho gusto estar de nuevo aquí con ustedes. Ya estoy avecindado en el istmo y de manera especial aquí, en Salina Cruz. Aquí, en el tiempo que llevo como presidente, he estado pues más de 10 veces y me he quedado aquí a dormir. Y me siento muy bien, muy tranquilo, no sólo porque para los hipertensos es bueno el nivel del mar, sino por su gente, por la gente de Salina Cruz y del istmo, que es muy cariñosa. Y ya saben que aquí aplica la frase del poeta José Martí, que amor con amor se paga.
Y nos da mucho gusto estar de nuevo porque estamos inaugurando esta obra, que es parte de un plan muy importante, de visión histórica, que tiene que ver con nuestra generación y también es garantizarles un futuro mejor a las nuevas generaciones.
Es un proyecto de dimensiones históricas porque desde que se invadió México… Y lo repito y lo repito, pero es importante que lo internalicemos, para dimensionar la importancia que tiene esta obra; repito que, desde la invasión europea, desde que estaba en el trono el monarca Carlos V en España, le pidió a Cortés que viniera aquí, al istmo. Cortés estuvo, le escribió, porque le pedía Carlos V que buscara un paso para unir el Pacífico con el Atlántico. Cortés no le dio mucha importancia al proyecto, aunque otros monarcas siguieron insistiendo.
Llegó un científico alemán, el barón de Humboldt, y recorrió toda América para buscar también un paso que uniera los dos más grandes océanos del mundo, no olvidemos que es el Pacífico el océano más grande.
Y entre otras cosas que nos dejó el barón de Humboldt, hizo un estudio para recomendar nueve pasos para unir los dos océanos y fue decantando opciones hasta concluir que eran tres los más viables, los más importantes: Panamá, Nicaragua y el Istmo de Tehuantepec.
Pasó el tiempo en este proyecto. También participaron el libertador Simón Bolívar, que estuvo personalmente en Panamá cuando todavía ese país pertenecía a la Gran Colombia, y opinó el presidente Lincoln, desde luego participó el presidente Juárez en impulsar este proyecto, hasta que gobierna Porfirio Díaz que se decide comunicar el istmo construyendo los dos puertos: el de Coatzacoalcos y el de Salina Cruz; se construyeron estos puertos al mismo tiempo que se construía el puerto de Veracruz.
Tenía Porfirio Díaz un contratista amigo, Pearson, inglés, que también era dueño de la compañía petrolera El Águila. Y este constructor inglés, que también llevó a cabo la obra del Gran Canal del Desagüe, en la Ciudad de México, porque Tenochtitlán, como ustedes saben, era una gran ciudad rodeada de agua, de lago, con canales, y al paso del tiempo tomaron la decisión de sacar el agua y él, en la época de Porfirio Díaz, Pearson, hizo el proyecto delGran Canal del Desagüe.
Construyó el puerto de Veracruz y, como ya dije, construyó el puerto de Coatzacoalcos y este puerto de Salina Cruz, pero también él construyó el ferrocarril, las vías férreas para comunicar Coatzacoalcos con Salina Cruz, los dos puertos y el ferrocarril.
Estuvieron terminadas estas obras antes de que concluyera el canal de Panamá, los estadounidenses impulsaron la construcción del canal de Panamá.
Antes de eso, Panamá se convirtió en un país independiente, se desmembró de Colombia, y se inició la construcción del canal de Panamá. Pero antes de que atravesara el canal un barco, ya se había inaugurado este corredor transístmico con el ferrocarril.
De modo que es una obra muy importante. No tuvo en su momento, siempre lo recuerdo, el éxito que se esperaba, porque en ese entonces Asia, los países de Asia, no eran lo que son ahora. Recuérdense que durante siglos el puerto más importante de México fue el puerto de Veracruz, los puertos del Pacífico no eran relevantes. Ahora es distinto, todo el tráfico mercante se lleva a cabo básicamente por el Pacífico, por eso la importancia de los puertos de Manzanillo, de Lázaro Cárdenas, y por eso también la importancia de Salina Cruz, este nuevo proyecto, porque se tienen muchas ventajas comparativas en Salina Cruz.
Este rompeolas va a permitir, como ya se ha dicho, que puedan arribar barcos de gran calado, que necesitan profundidad y este puerto tiene la profundidad suficiente para los grandes barcos llamados Post Panamax, barcos de carga de contenedores enormes. Con este rompeolas van a poder llegar esos barcos por el calado que tiene el puerto, que eso lo hace muy especial.
También hay otra circunstancia favorable: nosotros no deseamos que le vaya mal al pueblo de Panamá, son nuestros hermanos. Les costó mucho obtener su independencia, recuperar su soberanía, porque se hizo el canal, pero era administrado por Estados Unidos;es hasta que llega el presidente Jimmy Carter, un presidente demócrata, que entiende que ya no podían ellos estar invadiendo las tierras de Panamá. Además que había un dirigente en Panamá, y no sólo el dirigente, el pueblo de Panamá, exigiendo la independencia, exigiendo el respeto a la soberanía. Pero ayudó mucho el hecho de que estuviese el presidente Carter, que todavía vive y le deseamos que viva más tiempo.
En Panamá había un gran dirigente, Omar Torrijos, un dirigente popular, nacionalista, y ese fue el que tomó la bandera, hasta lograr con Carter el acuerdo para que les devolviera la soberanía a Panamá.
Yo fui amigo de ese gran escritor, el Cervantes de nuestra América, Gabriel García Márquez. Y en vez de hablar de política, porque él era muy respetuoso y no quería meterse en asuntos internos en nuestro país, aunque vivía en México García Márquez… Y nos reuníamos con frecuencia; una de las cosas que disfruté con él fue cuando me contó que acompañó a Omar Torrijos a la firma del tratado para que le devolvieran a Panamá su territorio; iba otro gran escritor, Graham Greene, con él, fue Omar Torrijos con dos grandes escritores que lo acompañaron. Y como anécdota me platicó ‘el Gabo’ que no pudo disfrutar la cena de jefes de Estado, de jefes de gobierno, porque Graham Green estaba molesto por la presencia de Pinochet y quería ir a encararlo. Y dice que se pasó toda la noche cuidando a Graham Green. Pero se firmó el tratado.
No fue así que, al año siguiente, se entregó la soberanía a Panamá; llevó algún tiempo, pero se firmaron esos acuerdos y se cumplió y ahora son los panameños, nuestros hermanos, los que administran el canal.
Digo todo esto porque no podemos desearles que le vaya mal. No vamos nosotros a competir con ellos, yo creo que el crecimiento económico en el mundo alcanza para todos si se maneja de manera equitativa.
Ellos han tenido algún problema por falta de agua y ya también porque son muchos los barcos que pasan por el canal, es bastante la demora para atravesar el canal. Y este puerto es la opción, esta es la alternativa; desde luego, hay que continuar con los trabajos, nosotros vamos a dejar toda la infraestructura básica, este rompeolas, pero hacen falta las plataformas para la descarga de contenedores, las espuelas para el ferrocarril de carga, comprar más locomotoras para el ferrocarril de carga, seguir mejorando la vía para hacer muy poco tiempo, siete, ocho horas de Salina Cruz a Coatzacoalcos; allá también hacer lo mismo y de ahí a la costa este, que esa es otra ventaja comparativa.
Toda nuestra relación comercial —hoy en la mañana hablaba yo de eso— la tenemos en el norte con Estados Unidos. Ya somos el principal socio comercial de Estados Unidos, ya no es China, es México el principal socio económico y comercial de Estados Unidos, pero toda la relación comercial se tiene con California, con Arizona, con Texas, y la costa este de Estados Unidos está virgen, y es lo que tenemos nosotros también como posibilidad, el que podamos desarrollar todo el Corredor Transístmico y hacer comercio con la costa este de Estados Unidos.
También tenemos que desarrollar los polos para que se establezcan plantas, fábricas. Este año y el próximo, Salina Cruz no va a tener mucho problema porque estamos invirtiendo en la planta coquizadora, esa planta significa una inversión de 120 mil millones de pesos, esta planta que tenemos aquí, que se está construyendo, ahí hay trabajo para tres mil, cinco mil obreros durante un año.
Pero tenemos que estar pensando en otros proyectos. La industria de la construcción es fundamental, es muy noble para que se pueda reactivar pronto la economía, se generan muchos empleos, hay bienestar si se impulsa la industria de la construcción.
Entonces, ya lo que se inició que no se pare: es la coquizadora, son los polos de desarrollo, es la ampliación de los puertos, es mejorar las vías férreas y seguir adelante. Y en el mediano plazo ya los que nos van a relevar, las nuevas generaciones, van ellos a recordarnos con más cariño que ahora, van a decir, pensaron en nosotros.
Por eso, me da mucho gusto estar con ustedes. Vamos hacia adelante.
También, como siempre lo digo, no nos preocupemos mucho por el futuro inmediato, afortunadamente está dando frutos el trabajo que se hizo durante muchos años entre todos y desde abajo para crear consciencia en la gente, eso que llamamos revolución de las consciencias, que es una revolución pacífica, muy importante porque cuando cambia la mentalidad del pueblo cambia todo, y eso es lo que está sucediendo en México.
Por eso, no debemos de preocuparnos, porque la transformación va a continuar, no hay nada que temer ni debemos de preocuparnos. Yo tengo que entregar la banda presidencial en siete meses, pero estoy contento porque hablo con la gente, siempre recojo los sentimientos del pueblo. Este fin de semana pasada estuvimos en Jalisco, estuvimos en Sinaloa, estuvimos en Baja California Sur porque, les doy una buena noticia: además, aquí hay una salinera, allá hay una salinera importante, pero la mitad era de México y la otra mitad era de los japoneses, ya ahora toda la salinera es de México, ya se nacionalizó, no expropiamos, compramos.
Como compramos también la refinería de Deer Park, la compramos en 600 millones de dólares y en un año se pagó la refinería.
Bueno, también estuvimos ayer en Sonora con los yaquis porque se les construyeron, entre otras cosas, obras como un acueducto de 450 kilómetros de tubería, porque fueron los más maltratados, vejados, humillados; los querían exterminar para quitarles sus tierras, asesinaron a 15 mil indígenas yaquis. Por eso el Plan de Justicia para los Pueblos Yaquis.
Ya esto ya cambió. Ya ahora, por el bien de todos, primero los pobres, primero los olvidados.
Y ahora estamos aquí, y lo mismo, dondequiera que vamos, la gente está muy contenta y por eso puedo decirles que va a continuar la transformación.
Yo me voy a retirar, me voy a jubilar, porque soy maderista. No se olviden de los principios, los principios son todo, los ideales. Y acuérdense lo que decía el Apóstol de la Democracia: sufragio efectivo no reelección.
Además, les repito: me siento muy tranquilo porque quien va asustituirme, la persona que va a sustituirme es extraordinaria, esa persona piensa igual que ustedes, igual que yo. Entonces, para qué nos preocupamos.
Además, no hay que tenerle mucho apego ni al poder, ni al dinero. La felicidad, ya lo saben, es estar bien con uno mismo, es estar bien con nuestra consciencia y estar bien con el prójimo. Y cuando yo termine puedo decir dentro de siete meses: misión cumplida.
¡Y que viva Salina Cruz!
¡Que vivan los pueblos del Istmo!
¡Que viva Oaxaca!
¡Viva Juárez!
¡Viva México!
¡Viva México!
¡Viva México!